¿Qué es la carta de presentación? ¿Para que sirve?

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A menudo no se está familiarizado con distintos formalismos y presentaciones a la hora de buscar trabajo, pues uno puede hacerse preguntas. ¿Qué es la carta de presentación? … Pues es la carta que acompaña a tu currículum y que va destinada a una empresa para ofrecer tus servicios espontáneamente. En esta carta que el mismo nombre describe como presentación tendrás la oportunidad de presentarte ante la empresa de una forma más amena que con tu currículum.

Recuerda que la extensión de la carta de presentación siempre debe ser de una página, por lo tanto utilízala para complementar la información que queda parcial o totalmente inexplicada en tu currículum.

Dedícale mucho tiempo a completar la carta de presentación, pues es aquí donde debes transmitir todos los valores que busca cualquier empresa: motivación, interés, ganas de aprender y evolucionar profesionalmente, ambición, ilusión y en definitiva una breve descripción del porqué esa empresa necesita tus servicios. Explícale de forma concisa y des de tu lado más personal que vas a aportar a la empresa y que te distingue de cualquier otro candidato que está optando también para el puesto de trabajo.

En definitiva, en la carta de presentación debes venderte lo mejor posible y debes transmitir fuerza, energía y vitalidad para el puesto; pero cuidado! No te pases de excitación. Mide tus palabras, ambiciones y objetivos, pues si has conseguido captar la atención del reclutador, éste va a estudiar tu currículum, que debería estar en consonancia con todo lo que ha leído anteriormente.

Obviamente la carta de presentación debe ser imprimida en un folio de fondo blanco y por una sola cara tamaño Din-A4 y evitando cualquier tipo de impresión de baja calidad o fotocopia. El formato y tipo de papel obligatoriamente debe ser el mismo que el del currículum, dando una directa correlación entre la carta de presentación y tu currículum.

Tipos de cartas de presentación.

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Básicamente existen dos tipos de cartas de presentación:

CARTA  DE RESPUESTA: Responde a un anuncio de empleo concreto por lo que tu candidatura debe ser óptima a ese puesto de trabajo. Para ser más objetivo piensa que espera leer el reclutador en tu carta de presentación, pues debes ajustarte en la medida de lo posible a todo lo que se pide para ese puesto de empleo. También es bien sabido que muchas veces se piden muchos más requisitos de los necesarios para el cargo, así que no mientas sobre tus habilidades y conocimientos.  No olvides señalar la referencia del anuncio en cuestión, por ejemplo: en relación al anuncio…, atendiendo a su oferta por el puesto de trabajo…, con referencia al puesto de…

Es muy importante que te tomes tu tiempo para investigar qué tipo de proyectos, gestiones o tareas se llevan a cabo en la empresa y también el tipo de cargo por el que estás interesado.

Naturalmente las cartas de respuesta deben ser siempre personalizadas; es decir debe aparecer el nombre de la empresa en distintas partes de la carta (ver en próximos capítulos). Si tienes la posibilidad, intenta conocer que personal trabaja en recursos humanos y quien será el encargado de leer tu currículum/carta de presentación para dirigirnos directamente a él. Habrás ganado mucho terreno respecto a todos tus demás competidores.

CARTA DE AUTOCANDIDATURA: Son cartas de presentación pensadas para un futuro próximo. Se adjunta con el cv y se manda de forma espontánea. La misión es que dicha empresa te tenga en consideración para futuras vacantes y puedan llamarte para futuros procesos de selección. Si dedicas tu tiempo en tu carta de auto-candidatura tendrás mucho ganado; pasarás a ser archivado para futuros perfiles que interesen a la empresa.

Por lo general esta carta va dirigida a altos cargos, siempre por encima del tuyo: director general o de departamento, y nunca al área de recursos humanos.

Estructura de la carta de presentación

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La carta de presentación debe mantener siempre una misma conformación y no debe extenderse más de una página. Generalmente la estructura de la carta de presentación esta formada entre cuatro y cinco párrafos para segmentar la información y venderte ante el reclutador. Como norma procederemos con los siguientes apartados:

  1. Datos personales:Es importante hacer resaltar a simple vista y hacer fácilmente identificables tus datos personales: nombre, correo electrónico, teléfono (si la oferta es del mismo país donde vives) y la referencia del anuncio (en caso que la haya).
  2. Datos de la empresa:Es importante que busques un espacio en el papel donde puedas escribir el nombre de la empresa subrayado, con la dirección postal, número de teléfono y página web. Sin duda alguna dará una imagen de carta muy personalizada solo para esa empresa.

Normalmente este espacio tendría que ser ubicado en alguna parte lateral o superior de la carta que no moleste pero que se vea.

  1. Saludo y presentación:Como te presentes dependerá de responder a una oferta concreta o a una candidatura espontánea, por lo tanto infórmate del nombre del destinatario o responsable de recursos humanos que va a leer tu carta.  En todo caso siempre guarda un tratamiento de cortesía para tu destinatario para demostrar respeto  y cordialidad. Aprovecha también para  mencionar como has encontrado la oferta.

Puedes usar frases formales de apertura como por ejemplo: “Respondiendo a un anuncio u oferta…, con referencia al puesto de…, atendiendo a la oferta aparecida en…, estando interesado en trabajar en su empresa…

  1. Motivo y objetivo de la carta: Es aquí donde debes reflejar tus puntos fuertes y habilidades sin alargarte demasiado. Haz un breve resumen de tu situación académica y profesional, haciendo especial hincapié en la que más te convenga. A modo de ejemplo un resumen rápido podría ser: Soy (titulado, nivel profesional, profesión…) he trabajado en… con una experiencia de…

Destaca brevemente lo más importante de tu currículum pero complementándola con información útil e instructiva.  Explica cómo eres profesionalmente y nombra por encima tus expectativas y tus metas, así como lo qué esperas recibir obteniendo ese trabajo (sin referirse a la parte económica, obviamente).

Demuestra tu interés por el puesto y por qué esa empresa necesita de tus servicios. Debes dar información valiosa para atraer la atención del reclutador.

“Considerándome capacitado para realizar este trabajo, con iniciativa propia para promover… , experimentado en asumir el peso y dirigir a equipos humanos… Lleva la carta al terreno que más te convenga.

Es importante que dediques tu tiempo a segmentar toda esta información y la separes por párrafos bien espaciados para dar aire y conformar una correcta estructura en la carta de presentación. Utiliza un vocabulario profesional o de la jerga para mostrar conocimiento en el tema.

Menciona tu disponibilidad y movilidad para ese trabajo si es el caso.

  1. Despedida:Obviamente debes guardar las formas con tu despedida igual que lo hiciste con tu saludo. Incluye agradecimientos y predisposición para una entrevista personal. Finalmente despídete de forma cordial y firma tu carta inferior. Es importante que tengas escaneada tu firma para pegarla digitalmente. Puedes usar frases formales de cierre como por ejemplo: “A la espera de sus noticias, me despido con un cordial saludo…, quedo a su disposición para concretar una entrevista… o, sin otro particular, se despide atentamente…

Consejos básicos para una carta de presentación

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En este apartado vamos a destacar algunas pautas y consejos básicos para una carta de presentación. A menudo, muchas personas descuidan pequeños detalles que dan valor al documento y ayudan a potenciar tu candidatura para un puesto u oferta de trabajo:

  1. ORDEN:Crea una carpeta en tu ordenador donde puedas localizar fácilmente las cartas de presentación personalizadas que mandaste. Así en cuanto recibas respuesta sabrás exactamente para que empresa y puesto solicitaste. Cuando se busca empleo a menudo se mandan cientos de emails a la desesperada y si no eres ordenado, difícilmente podrás controlar de que empresas recibes contestación.
  2. MODO DE ENVÍO:Si tu carta de presentación ha sido enviada por e-mail, cuida el mensaje que escribes en éste. Debes guardar las mismas formas que lo hiciste en la carta, pero de forma más concisa para no repetirte; Intenta que tu mensaje sea no más largo de 3 o 4 frases, y debes indicar que adjuntas en el e-mail los archivos de carta de presentación y currículum vitae (en formato PDF). Para una mayor presentación e imagen de seriedad, tómate tu tiempo para crear en un solo archivo PDF, primeramente la carta de presentación y seguidamente el currículum, para que se pueda leer toda tu información de forma continuada. Facilita el trabajo al seleccionador y tendrás mucho terreno ganado. Si el envío es por correo postal adjúntala con el currículum vitae y sin grapar. Es muy importante no mandes ningún título ni carta de recomendación si no te lo han pedido previamente.
  3. PIENSAcomo lo haría el seleccionador que lee tu carta. Imagina que estás harto de leer siempre los mismos currículums y cartas de presentación con los tópicos  y los adjetivos calificativos exagerados de siempre. Debes demostrar valía y explicar algo que motive al seleccionador, algo que le empuje a seguir leyendo. En la medida de lo posible desmárcate de la típica carta desde el primer momento. Explica porque te has postulado por esa oferta y no otra, que te ha incitado a llamar a esa empresa y no otra, que proyecto tienes para ellos o como va ayudar tu iniciativa, motivación o imaginación a la empresa. Si no tienes experiencia puedes enfocarlo hacia tus expectativas de empresa o profesionales. Siempre te será de gran ayuda si citas ejemplos, explicas logros conseguidos, actitudes adoptadas o decisiones que te hicieron escalar en tu vida profesional o incluso personal.
  4. NO TE SUBESTIMESy no caigas en el error de empezar mencionado puntos débiles sobre tu perfil, persona o experiencia. Analiza la sensación que da presentarse con frases como: “A pesar de mi poca experiencia…, lamentando mi bajo nivel de inglés…” y sobretodo nunca solicites dos puestos diferentes en una misma empresa o te presentes como un “sabelotodo” que puede ocupar cualquier vacante. Focaliza tu puesto de trabajo y postúlate sólo para uno.