La cruda realidad a la hora de ser contratado para un puesto de trabajo

errores curriculum

Parte de las situaciones que vamos a desarrollar a continuación pueden parecernos políticamente incorrectas o injustas, pero sucederán. Esto forma una parte tan importante en el proceso de selección como puede ser la entrevista. Al entregar nuestra hoja de vida, estamos dando el primer paso para que nos evalúen, nos juzguen y analicen los logros que hemos realizado en nuestras vidas. Los empleadores quieren ver si seremos capaces de adaptarnos al puesto de trabajo, quieren saberlo, aunque tengan que pre juzgarnos por nuestros gestos, aspecto físico, personalidad y muchas cosas más. Estos juicios pueden hacerse inconscientemente o a propósito, pero lo cierto es que lo hacen, y debemos ser consientes de esto, y tener las cosas claras antes de ir a una entrevista de trabajo, porque son la cruda realidad, aunque puedan parecernos fuera de lugar.

1. No contratan a gente que busca cualquier trabajo:

Las  empresas siempre van a preferir contratar a personas que realmente quieren y les interese de verdad ese trabajo, y no a los que buscan cualquier trabajo para salir de la situación de desempleo momentánea, que es la situación que tiene la gran mayoría cuanto se ha quedado sin trabajo. Ellos no quieren que las persona que han contratado se marchen cuando la situación personal y de empleo mejore. En cuanto un empleador perciba que quieres el trabajo para salir del paso, te descartará. Es muy habitual que esto suceda cuando un puesto de trabajo está por debajo de tu nivel de estudios y experiencia. Aquí es donde hay que replantearse la forma de hacer el currículum y darle relevancia a las cosas verdaderamente importantes de cara a la oferta de trabajo.

También te puede interesar leer: Los principales errores a la hora de hacer un curriculum y lo que puedes hacer para evitarlos. 

2. Pueden juzgarnos por nuestro nombre:

La primera cosa que un entrevistador ve en tu curriculum vitae es tu nombre. Está claro que todos queremos dar una buena impresión, y no se trata de cambiar lo que somos ¡y mucho menos nuestro nombre!, pero pensemos por un momento en el nombre que tenemos en la parte superior del currículum antes de enviarlo. Aunque parezca poco usual mucha gente utiliza apodos o diminutivos y estos son vistos como inmaduros e infantiles. Viéndolo desde la perspectiva de los entrevistadores: supongamos que tienen a dos candidatos y están tratando de decidirse por uno. Ven sus currículos y son bastante similares. Ven sus nombres, y uno se llama Miguel y el otro, J. Lalo. A juzgar por los nombres solos, ¿cuál suena más profesional? Por supuesto Miguel. Los apodos están muy bien para los amigos y miembros de la familia, incluso para los compañeros de trabajo, una vez que tienes el trabajo, pero espera hasta que llegue el trabajo antes de presentarse a sí mismo: «¡Hola! Mis amigos me llaman Lalo. »

Desafortunadamente la gente también te juzgará por el origen étnico de tu nombre. Los nombres que se asocian comúnmente con una raza específica serán juzgados de acuerdo a la percepción general del grupo de personas de los entrevistadores.

3. Nuestra apariencia física:

Es la realidad, las personas atractivas son más propensas a ser contratadas que las personas poco atractivas. Tanto es así que es común ver ofertas de empleo con las palabras: «Buena presencia». Estas son cualidades que buscan los empleadores, sobre todo en cargos de cara al público. Pero cuidado con este concepto de «buena presencia» ya que puede ir más allá, y puede tener otras connotaciones, hay gente realmente guapa y con aspecto saludable que pueden no cumplir las expectativas por vestir con mal gusto, tener piercings, tatuajes, o simplemente aparentan ser descuidados.

4. La edad:

Aquí hay distintas posturas, pero siempre va a depender de lo que estén buscando ya que si eres joven asumirán que no tienes ninguna experiencia, y si te consideran que eres demasiado viejo, podrían preguntarse por qué quieres el trabajo en este momento de tu vida. O por el contrario quieren la energía y el ímpetu de la gente joven, o la experiencia y la seguridad de una persona con más edad. Por ello, debemos analizar bien la oferta, y tener claros los requerimientos del puesto de trabajo para no sentirnos excluidos.

5. Rechazados por nuestro perfil en Facebook:

Hay estudios que lo demuestran ( Young People’s Consumer Confidence ) uno de cada diez jóvenes ha sido rechazado para un puesto de trabajo por su perfil en las redes sociales. Cada vez es más usual que los empleadores revisen nuestras cuentas en las redes sociales. Vivimos en un mundo basado en la tecnología, las cosas que se publican en los perfiles de las redes sociales son un reflejo de lo que eres. Tus mensajes mostrarán tus intereses, el vocabulario, el nivel de madurez, etc. Estas son todas las cosas que un futuro jefe querrá saber y estudiará acerca de nosotros.

6. Lugar de residencia:

La gente es consciente de que el lugar donde vives puede representar el tipo de comunidad donde te desenvuelves e incluso tu nivel social. Y la realidad es que los entrevistadores te juzgarán en función de dónde vives. Hay algunas cosas que puedes hacer si esta situación es un obstáculo para ti. Muchas personas han optado por dejar de poner en su currículo la dirección, código postal, lugar de nacimiento, etc. Un número de teléfono y una dirección de correo electrónico deben ser suficientes. Otra opción es poner la dirección de los padres o la dirección de un familiar, si crees que la comunidad o el lugar donde viven te puede beneficiar.

En conclusión:

La búsqueda de un trabajo es muy dura. Muchos factores intervienen a la hora de ser seleccionado para un determinado trabajo, y estos factores no son sólo tus estudios, calificaciones, experiencia y buen hacer de las cosas. Algunos de estos factores son las cosas que nunca podría haber pensado, pero que tienen mucha importancia, y pueden ser muy duros de asimilar y de corregir. A veces la cosa más pequeña podría causar que no te contraten. Toma en cuenta estos pequeños detalles la próxima vez que vayas a una entrevista y prepárate para afrontarlos y de buscar soluciones para que estos detalles pasen desapercibidos.