La crisis cambia el mercado laboral

Está claro que la consecuencia principal que tiene la crisis es la pérdida de empleo. Ahora mismo esta cifra está imparable. La conclusión es fácil: no hay trabajo y cada día se destruye más. Sin embargo, un análisis profundo nos puede llevar mucho más allá.

Hay pocas oportunidades de empleo y éstas no son las que eran más demandadas antes de la crisis. Según un informe realizado a finales del año pasado por la empresa de trabajo temporal Adecco, gran parte de las ofertas de trabajo proceden del sector comercial. Cada día se busca más la venta directa. Dicho de otra manera, la desaparición de los intermediarios, de los mediadores y, por ende, de sus sueldos. En este sentido, el de técnico o asesor comercial es uno de los empleos más ofertados.

También hay cada vez una mayor preocupación por lo que se consume. Por ello, hay bastantes ofertas de supervisor de producción. Otro sector que no para de moverse es el de la informática, programación, redes y marketing online . Dentro de este mundo, el de programador web y Trafficker Digital o Traffic Manager son unos de los empleos más ofertados.

Dicen que los tiempos de crisis agudizan el ingenio. Las personas le dan vueltas y vueltas a la cabeza hasta que la bombillita se ilumina y se les ocurre una buena manera de ganar dinero. Sólo así se entienden algunas de las que, dicen, serán las profesiones del futuro.

Pero no son estas las profesiones más sorprendente. Ahí van algunas más: nano-técnico, nano-médico, gestor de voluntarios, maestro digital o diseñador de sueños. Se imaginan. “¿A qué te dedicas?: soy diseñador de sueños. El futuro dirá si estas previsiones están en lo cierto.